La lascivia huye con la protesta de los hijos. El Reavivamiento y la Reforma ganan
MEDITACIÓN PARA LA ORACIÓN DE APERTURA
Como Asegurar el Conocimiento Imperecedero
Leeré de Palabras de Vida del Gran Maestro, página 23, comenzando en el tercer párrafo. --{2LO6 12.1}
“Al apartarse de la Palabra de Dios para alimentarse de los escritos de los hombres no inspirados, la mente llega a empequeñecerse y degradarse. No se pone en contacto con los profundos y amplios principios de la verdad eterna. La inteligencia se adapta a la comprensión de las cosas con las cuales se familiariza, y al dedicarse a las cosas finitas se debilita, su poder decrece, y después de un tiempo llega a ser incapaz de ampliarse. Todo esto es falsa educación. La obra de todo maestro debe tender a afirmar la mente de la juventud en las grandes verdades de la Palabra inspirada. Esta es la educación esencial para esta vida y para la vida venidera. Y no se crea que esto impedirá el estudio de las ciencias, o dará como resultado una norma más baja en la educación. El conocimiento de Dios es tan alto como los cielos y tan amplio como el universo. . . Traten los jóvenes de comprender estas verdades divinas, y sus mentes se ampliarán y vigorizarán con el esfuerzo. Esto colocará a todo estudiante que sea un hacedor de la palabra, en un campo de pensamiento más amplio, y le asegurará una imperecedera riqueza de conocimiento. . . Tal educación restaurará la imagen de Dios en el al- ma.” --{2LO6 12.2}
¡Qué lección no sólo para los jóvenes sino para los adultos también! Oremos que podamos darnos cuenta de la importancia de estudiar la Verdad inspirada; que podamos darnos cuenta que ésta no elimina el estudio de la ciencia verdadera; que al consagrar nuestras vidas a la Palabra de Dios es para obtener un gran tesoro de sabiduría; que así la imagen de Dios es restaurada en el alma. --{2LO6 12.3}
LA LASCIVIA HUYE CON LA PROTESTA DE LOS HIJOS
EL REAVIVAMIENTO Y LA REFORMA GANAN
TEXTO DE LA ALOCUCIÓN POR V. T. HOUTEFF
MINISTRO DE LOS DAVIDIANOS ADVENTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA
EL SÁBADO, 13 DE SEPTIEMBRE DE 1947
CAPILLA DEL MONTE CARMELO
WACO, TEXAS
Nuestro estudio se encuentra en los capítulos primero y segundo de Oseas. Comenzaremos con – --{2LO6 13.2}
Ose. 1:2 – “El principio de la palabra del Señor por medio de Oseas. Dijo el Señor a Oseas: Ve, tómate una mujer fornicaria, e hijos de fornicación; porque la tierra fornica apartándose del Señor.”
--{2LO6 13.3}
Inmediatamente vemos que esta esposa y estos hijos simbolizan al pueblo de Dios apartándose de Él, y que a tal acto impío Él lo llama fornicación. --{2LO6 13.4}
Ose. 1:3, 4 – “Fue, pues, y tomó a Gomer hija de Diblaim, la cual concibió y le dio a luz un hijo. Y le dijo el Señor: Ponle por nombre Jezreel; porque de aquí a poco yo castigaré a la casa de Jehú por causa de la sangre de Jezreel, y haré cesar el reino de la casa de Israel.”
La razón de Dios para nombrar así al primer hijo visto en visión, era para significar que dentro de poco Él iba a vengar la sangre de Jezreel sobre la casa de Jehú, quien era entonces el rey de Israel. Luego declara el Señor:
--{2LO6 13.5}
Ose 1:5 – “Y en aquel día quebraré yo el arco de Israel en el valle de Jezreel.”
--{2LO6 14.1}
Quebrar el arco significa quebrantar la fuerza militar de la nación. La historia de esto está registrada en 2 Reyes 10, 11. --{2LO6 14.2}
Ose. 1:6 – “Concibió ella otra vez, y dio a luz una hija. Y le dijo Dios: Ponle por nombre Lo-ruhama, porque no me compadeceré más de la casa de Israel, sino que los quitaré del todo.”
--{2LO6 14.3}
Este nombre de la hija era para denotar la destrucción total de la casa de Israel –el reino de las diez tribus. Sabemos que esta destrucción fue llevada a cabo por el rey de Asiria, quien esparció el pueblo por las ciudades de los medos. La historia de esto se encuentra en 2 Reyes 18:11 – “Y el rey de Asiria llevó cautivo a Israel a Asiria, y los puso en Halah, en Habor junto al río Gozán, y en las ciudades de los medos.” --{2LO6 14.4}
Ose. 1:7 – “Mas de la casa de Judá tendré misericordia, y los salvaré por el Señor su Dios; y no los salvaré con arco, ni con espada, ni con batalla, ni con caballos ni jinetes.”
--{2LO6 14.5}
El Señor prometió perdonar a la casa de Judá de la invasión del rey de Asiria. La historia de este incidente está registrada en 2 Reyes 19:35 –“Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel del Señor, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos.” --{2LO6 14.6}
Ose. 1:8, 9 – “Después de haber destetado a Lo-ruhama, concibió y dio a luz un hijo. Y dijo Dios: Ponle por nombre Lo-ammi, porque vosotros no sois mi pueblo, ni yo seré vuestro Dios.”
--{2LO6 15.1}
El nombre del tercer hijo era para significar que aunque Israel y Judá eran el pueblo escogido de Dios, se estaba apresurando el día en el cual ellos no serían más llamados su pueblo. El cumplimiento de esta fase de la profecía nos trae a la era cristiana. --{2LO6 15.2}
Ose. 1:10 – “Con todo, será el número de los hijos de Israel como la arena del mar, que no se puede medir ni contar. Y en el lugar en donde les fue dicho: Vosotros no sois pueblo mío, les será dicho: Sois hijos del Dios viviente.”
--{2LO6 15.3}
A pesar de las calamidades que iban a sobrecoger a los hijos de Israel, ellos iban a llegar a ser muy numerosos. Y cuando sean así grandemente multiplicados, ellos otra vez han de ser llamados hijos de Dios. Y así vemos aquí una profecía de la rebelión del pueblo de Dios, del rechazo de Dios, así como su arrepentimiento y la aceptación de nuevo por Él. --{2LO6 15.4}
Hablemos por un momento de los títulos “Judá” e “Israel.” Cuando se leen superficialmente estos títulos, son por regla general mal interpretados y se les hace dar a entender que significan los judíos identificados. Pero no debemos ser lectores y razonadores superficiales. Seamos estudiantes profundos de la Biblia. Ahora, todos sabemos que los judíos identificados de hoy son sólo un puñado – ciertamente no como la arena del mar. Por lo tanto, los innumerables hijos de Israel, no pueden ser los judíos incrédulos de hoy. Por otra parte, los judíos identificables de hoy no son los descendientes del reino de las diez tribus sino del reino de las dos tribus. Entonces, ¿quién es esta multitud de gente a la que se refiere la profecía de Oseas? --{2LO6 15.5}
No debemos pasar por alto el hecho que el Evangelio de Cristo dividió la casa de Judá en dos sectas –judíos y cristianos, que por cerca de cuatro años después de la resurrección de Cristo, la iglesia cristiana consistió prácticamente de judíos solamente. Claramente, los cristianos originales eran judíos de sangre pura, –la iglesia cristiana es sólo una ramificación de la iglesia judía, pero ellos y sus descendientes a través de los años, han perdido su identidad racial. Por consiguiente, también los descendientes de Israel y de Judá, quienes a través de los años de cautiverio perdieron su identidad como lo hicieron los judíos que abrazaron el cristianismo, de acuerdo a la profecía deben haber sido multiplicados grandemente. Claramente, entonces, muchos que son tomados como gentiles, no son sino descendientes no identificados de Judá e Israel antiguos y de los judíos cristianos. La misma iglesia cristiana es, como hemos visto, una iglesia judío-cristiana. --{2LO6 16.1}
Por lo tanto, estos descendientes de Jacob que fueron asimilados por las naciones gentiles, habían de multiplicarse como la arena del mar. Ellos son los que, después de convertirse en cristianos, son llamados nuevamente hijos del Dios viviente. --{2LO6 16.2}
De los que abrazaron primero la fe cristiana, el apóstol Pedro dice: “Vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.” 1 Ped. 2:10. --{2LO6 16.3}
Y el apóstol Juan dice: “Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.” Juan 1:12. --{2LO6 16.4}
Ahora vemos que la profecía de Oseas 1 comienza con la casa de Israel y Judá y nos trae a través de la corriente del tiempo hasta la era cristiana. Para obtener luz acerca de la iglesia en el período cristiano, vayamos a– --{2LO6 17.1}
Ose. 1:11 – “Y se congregarán los hijos de Judá y de Israel, y nombrarán un solo jefe, y subirán de la tierra; porque el día de Jezreel será grande.”
--{2LO6 17.2}
Por lo tanto, la Palabra de Dios definitivamente declara que los súbditos de los reinos destruidos – Judá e Israel –como cristianos, junto con los gentiles que se les han unido, se juntarán y nombrarán para sí un rey. --{2LO6 17.3}
En un simbolismo similar, le fue dicho al profeta que después de muchos años de obscuridad y de vagar, “Después volverán los hijos de Israel, y buscarán al Señor su Dios, y a David su rey [evidentemente David es “la cabeza” que ellos nombran]; y temerán al Señor y a su bondad en el fin de los días.” Ose. 3:5. --{2LO6 17.4}
Continuando con la misma ilustración de la familia, y apuntando hacia la era cristiana, el Señor ordena: --{2LO6 17.5}
Ose. 2:1 – “Decid a vuestros hermanos: Ammi; y a vuestras hermanas: Ruhama.”
--{2LO6 17.6}
Aquí vemos que los nombres de los dos hijos del capítulo 1 son mencionados nuevamente, pero las primeras dos letras de cada nombre han sido quitadas: --{2LO6 17.7}
Lo-ruhama ha venido a ser Ruhama y Lo-ammi ha venido a ser Ammi. Ahora el hecho que estos son hermano y hermana de Jezreel, apoya la verdad que al que el Señor manda a hablarles a ellos, es Jezreel, el mayor de los tres. Él ha de dar el mensaje a sus hermanos, Ammi y Ruhama. --{2LO6 18.1}
Ahora ¿qué en cuanto a todo esto? –No es muy difícil verlo. Jezreel, a quien el Señor habla, representa un profeta. Su hermano Ammi y su hermana Ruhama, pueden representar únicamente la membresía de la iglesia, ambos masculino y femenino. En la realidad Jezreel debe llevar el mensaje de Dios a ellos. Y aquí está el mensaje: --{2LO6 18.2}
Ose. 2:2 – “Contended con vuestra madre, contended; porque ella no es mi mujer, ni yo su marido; aparte, pues, sus fornicaciones de su rostro, y sus adulterios de entre sus pechos.”
--{2LO6 18.3}
El hecho de que Dios mismo llama a la esposa alegórica del profeta Oseas su propia esposa, revela que ella representa la iglesia, que Oseas representa a Dios y que mientras Jezreel representa el portavoz de Dios, Ammi y Ruhama representan la membresía de la iglesia. En la infancia (Oseas 1) ellos representan la iglesia del Antiguo Testamento, los hebreos, pero en su juventud –teniendo sus nombres cambiados, (Oseas 2), ellos representan la iglesia del Nuevo Testamento, los cristianos. --{2LO6 18.4}
Ahora que los laicos, al mandato de Dios a través de un profeta están contendiendo con la iglesia, por consiguiente, la reforma traída aquí es promovida por la Inspiración y llevada por los laicos. Este es el reavivamiento y la reforma por tanto tiempo esperados para los laodicenses, y de aquí que es un movimiento laico traído por el Espíritu de Profecía reavivado. --{2LO6 18.5}
De esta profecía vemos que la Denominación es acusada por Dios mismo de “prostitución,” por tener relaciones ilícitas con el mundo. Ella debe abandonar esta prostitución si quiere obtener el favor de Dios. --{2LO6 19.1}
Entendamos que estas no son palabras de hombre, sino de Dios. ¿Y no deberíamos estar agradecidos porque Él está haciendo todo lo que puede para salvarnos? La iglesia tiene que arrepentirse, dice el Señor: --{2LO6 19.2}
Ose. 2:3 – “No sea que yo la despoje y desnude, la ponga como el día en que nació, la haga como un desierto, la deje como tierra seca, y la mate de sed.”
--{2LO6 19.3}
La Denominación con frecuencia se jacta de ganar miembros (hijos), pero Dios la acusa de que esos que ella trae ¡son hijos ilegítimos! ¿Y cómo podría ser de otra manera si la iglesia misma está corrompida con el mundo? ¿Qué otra cosa podrían ser sus conversos? ¿Qué los liberaría de la influencia mundana, si ella misma (el ministerio), está contaminada con las prácticas del mundo? Verdaderamente sus conversos no pueden ser hijos legítimos. --{2LO6 19.4}
Ose. 2:5 – “Porque su madre se prostituyó; la que los dio a luz se deshonró, porque dijo: Iré tras mis amantes, que me dan mi pan y mi agua, mi lana y mi lino, mi aceite y mi bebida.”
--{2LO6 19.5}
La iglesia ha ido en pos del mundo porque ella equivocadamente piensa que su sostén viene del mundo, de sus “amantes.” --{2LO6 19.6}
Ose. 2:6 – “Por tanto, he aquí yo rodearé de espinos su camino, y la cercaré con seto, y no hallará sus caminos.”
--{2LO6 20.1}
Vemos aquí que la iglesia propone pero Dios dispone; sus planes no salen como ella espera –ella pierde su camino como lo hace un barco sin mapa o brújula sin rumbo en el mar. --{2LO6 20.2}
Ose. 2:7 – “Seguirá a sus amantes, y no los alcanzará; los buscará, y no los hallará. Entonces dirá: Iré y me volveré a mi primer marido; porque mejor me iba entonces que ahora.”
--{2LO6 20.3}
Nuevamente vemos que las pruebas y circunstancias adversas son para nuestro bien, porque es así como la iglesia es traída a sus sentidos correctos. --{2LO6 20.4}
Ose. 2:8-12 – “Y ella no reconoció que yo le daba el trigo, el vino y el aceite, y que le multipliqué la plata y el oro que ofrecían a Baal. Por tanto, yo volveré y tomaré mi trigo a su tiempo, y mi vino a su sazón, y quitaré mi lana y mi lino que había dado para cubrir su desnudez. Y ahora descubriré yo su locura delante de los ojos de sus amantes, y nadie la librará de mi mano. Haré cesar todo su gozo, sus fiestas, sus nuevas lunas y sus días de reposo, y todas sus festividades. Y haré talar sus vides y sus higueras, de las cuales dijo: Mi salario son, salario que me han dado mis amantes. Y las reduciré a un matorral, y las comerán las bestias del campo.”
--{2LO6 20.5}
De estos versículos vemos que fue tal separación de Dios lo que causó que la iglesia en su etapa cristiana primitiva perdiera su camino y todas sus posesiones, incluyendo sus días de fiesta, sus lunas nuevas, sus sábados y todas sus fiestas solemnes. --{2LO6 20.6}
Esto fue exactamente lo que pasó cuando comenzó la “Edad Obscura” de la religión. Los paganos en cuyas garras cayó la iglesia no fueron más culpables por llevar a la iglesia a la obscuridad que lo que fueron los caldeos de destruir a Judá y su templo. Verdaderamente la culpa cae sobre la iglesia misma. Y esta debería ser una lección duradera para cada uno de nosotros, para que nunca más tengamos conexión ilícita con el mundo y nunca nos apartemos del Señor. --{2LO6 21.1}
Ahora, leamos otras experiencias que la iglesia habría de pasar: --{2LO6 21.2}
Ose. 2:13, 14 – “Y la castigaré por los días en que incensaba a los baales, y se adornaba de sus zarcillos y de sus joyeles, y se iba tras sus amantes y se olvidaba de mí, dice el Señor. Pero he aquí que yo la atraeré y la llevaré al desierto, y hablaré a su corazón.”
--{2LO6 21.3}
Note que Dios visita la iglesia no cuando ella está en buena condición espiritual con Él, sino cuando ella está en su más grande idolatría. Verdaderamente, Él no podría visitarla en un tiempo más oportuno, porque sólo cuando está en las tinieblas más grandes puede ella posiblemente discernir la luz. Y sabemos que su condición no puede mejorar al menos que Él la llame. Así fue en el tiempo de Juan el Bautista, también cuando vino la reforma protestante, y así es hoy. Dios sabe como salvar. Salvar es su principal interés. --{2LO6 21.4}
“Dios requiere ciertas cosas de sus hijos; si ellos dicen: No renunciaré a mis ideas para hacer esto, el Señor les permite obrar de acuerdo con su supuesto buen juicio sin sabiduría celestial, hasta que este texto [Isa. 28: 13] se cumpla. No habéis de decir: Seguiré la dirección del Señor hasta un cierto punto que esté de acuerdo con mi juicio, aferrándoos entonces a vuestras propias ideas, negándoos a ser modelados a la semejanza del Señor. Hágase la pregunta: ¿Es ésta la voluntad del Señor? y no, ¿es ésta la opinión o el juicio de ?” –Testimonios para los Ministros, p. 419. --{2LO6 21.5}
¿Y cuál es la promesa de Dios para su iglesia ahora? --{2LO6 22.1}
Ose. 2:15 – “Y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza; y allí cantará como en los tiempos de su juventud, y como en el día de su subida de la tierra de Egipto.”
--{2LO6 22.2}
Como resultado de que sus viñas son restauradas y también por habérsele dado el valle de Acor por puerta de esperanza, la iglesia ha de cantar como en los días de su juventud, como cuando salió de la tierra de Egipto y se introdujo en la Tierra Prometida. ¿Qué podrán ser sus viñas sino su propia tierra? Y si el valle de Acor es una puerta de esperanza para ella, ¿qué puede ser sino lo que fue en el tiempo de Josué –quitar los Acanes de hoy de su medio (Ose. 2:15)? Verdaderamente, esta es su única esperanza –de hecho, aún más de lo que fue en los días de la derrota de Israel en Hai, la puerta a la Tierra Prometida. --{2LO6 22.3}
“Los que no sienten pesar por su propia decadencia espiritual ni lloran sobre los pecados ajenos quedarán sin el sello de Dios. El Señor ordena a sus mensajeros, los hombres que tienen las armas de matanza en la mano: ‘Pasad por la ciudad en pos de él, y herid; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad viejos, mozos y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno: mas a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no llegaréis; y habéis de comenzar desde mi santuario. Comenzaron pues desde los varones ancianos que estaban delante del templo.’ --{2LO6 22.4}
Aquí vemos que la iglesia, el santuario del Señor, era la primera en sentir los golpes de la ira de Dios. Los ancianos, aquellos a quienes Dios había brindado gran luz, que se habían destacado como guardianes de los intereses espirituales del pueblo, habían traicionado su cometido. Habían asumido la actitud de que no necesitamos esperar milagros ni la señalada manifestación del poder de Dios como en tiempos anteriores. Los tiempos han cambiado. Estas palabras fortalecen su incredulidad, y dicen: El Señor no hará bien ni mal. Es demasiado mi- sericordioso para castigar a su pueblo. Así el clamor de paz y seguridad es dado por hombres que no volverán a elevar la voz como trompeta para mostrar al pueblo de Dios sus transgresiones y a la casa de Jacob sus pecados. Estos perros mudos que no querían ladrar, son los que sienten la justa venganza de un Dios ofendido. Hombres, jóvenes y niñitos, todos perecen juntos.” Testimonios para la Iglesia, Tomo 5, p. 196. --{2LO6 23.1}
Ose. 2:16 – “En aquel tiempo, dice el Señor, me llamarás Ishi, y nunca más me llamarás Baali.”
--{2LO6 23.2}
Así es que después que los hipócritas y pecadores sean quitados del camino, la iglesia no llamará más al Salvador Baali (Señor), sino que ella lo llamará Ishi (Marido). El significado es que entonces Él será verdaderamente su marido, mientras que ahora Él es para ella como si fuera sólo alguien de grande personalidad. --{2LO6 23.3}
Ose. 2:18 – “En aquel tiempo haré para ti pacto con las bestias del campo, con las aves del cielo y con las serpientes de la tierra; y quitaré de la tierra arco y espada y guerra, y te haré dormir segura.”
--{2LO6 24.1}
Aquí hay paz, la única paz que uno puede tener hoy si así lo desea. Esta es paz que sobreabunda con seguridad. Los santos, después que los pecadores han sido quitados de entre ellos, no necesitan temer a las bestias, a las aves del cielo o a las serpientes de la tierra, ni a arma ni a espada; ellos pueden reposar en confianza y seguridad que nada los dañará, porque “Su aventador está en su mano, y limpiará su era; y recogerá su trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará.” Mat. 3:12 --{2LO6 24.2}
Ose. 2:19-21 – “Y te desposaré conmigo para siempre; te desposaré conmigo en justicia, juicio, benignidad y misericordia. Y te desposaré conmigo en fidelidad, y conocerás al Señor. En aquel tiempo responderé, [escucharé, versión en Inglés], dice el Señor, yo responderé [escucharé] a los cielos, y ellos responderán [escucharán] a la tierra.”
--{2LO6 24.3}
Al decir que el Señor escuchará a los cielos, y los cielos a la tierra, la Inspiración realmente dice que cuando estas cosas acontezcan en la tierra, el Señor ha de estar en medio de su pueblo, que Él hablará desde la tierra y sus súbditos en el cielo le escucharán. --{2LO6 24.4}
Ose. 2:22 – “Y la tierra responderá al trigo, al vino y al aceite, y ellos responderán a Jezreel.”
--{2LO6 24.5}
Oír al trigo, al vino y al aceite es oírlos hablar. Y puesto que el trigo, el vino y el aceite reales no pueden hablar, ellos deben ser figurativos de comida y bebida espirituales –figurativos del mensaje poderoso del día grande y terrible del Señor. Y por el hecho que la gente de la tierra oirá a Jezreel, el portavoz de Dios, es claro que el llamado, “Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis participantes de sus pecados, y no recibáis de sus plagas” (Apoc. 18:4), efectuará su obra asignada. Los que salgan irán al lugar de seguridad antes mencionado. Y los que no escuchen a Jezreel perecerán como los judíos que rechazaron a los profetas de sus días. --{2LO6 25.1}
Ahora repasemos nuestro estudio de hoy siguiendo esta ilustración gráfica: --{2LO6 25.2}
Aquí vemos a Jezreel, Lo-ruhama y Lo-ammi como niños gráficamente representando los reinos de Israel y Judá en sus calamidades, una completa pero breve historia de la iglesia y su pueblo del Antiguo Testamento. --{2LO6 26.1}
Luego vemos que las letras “Lo” son quitadas de los nombres Ruhama y Ammi, denotando un cambio de nombres –judíos llamados cristianos –significando “misericordia” y “mi pueblo” en lugar de “no misericordia” y “no mi pueblo.” Sin embargo, el nombre de Jezreel permanece igual, y como él representa a los profetas de Dios en todos los tiempos, esto muestra que ellos son los descendientes de Jacob y por lo tanto nosotros debemos oírlos y obedecerlos. --{2LO6 26.2}
La familia como niños representando al pueblo de la iglesia del Antiguo Testamento, y como jóvenes representando a la iglesia del Nuevo Testamento, muestra que el crecimiento espiritual ha sido hecho a través de la corriente del tiempo, que ahora ellos han crecido –capaces de tomar “comida sólida” y verdaderamente ser los reformadores de la iglesia y los misioneros para el mundo. --{2LO6 26.3}
También vemos que la misma madre y el mismo padre, junto con los mismos hijos, representan tanto a la iglesia del Antiguo como a la del Nuevo Testamento; que los descendientes de Jacob en realidad son el antiguo árbol de olivo (Rom. 11:24), que la única manera que los gentiles pueden entrar al Reino es siendo injertados en el antiguo árbol de olivo. Judío o gentil, todos se deben unir si ellos han de entrar en el Reino. Esto puede ser hecho solamente por nuestro propio consentimiento y acción ahora mientras el Espíritu está contendiendo con nosotros y mientras el Señor está listo para hacer la obra. Nadie necesita ser excluido. Nadie necesita permanecer un laodicense tibio a menos que así lo elija. Mi esperanza es que todos escogerán la vida en vez de la muerte. --{2LO6 26.4}
Inmediatamente vemos que la iglesia como un todo, como una familia, está compuesta de un padre, una madre, y de hijos y una hija, que el padre es Dios; que la esposa es el ministerio (los que traen a los conversos); que los niños son los laicos. También vemos que la iglesia (la mujer) estaba casada con el Señor en su juventud, en el día que salió de Egipto; que aunque el ministerio como un todo nunca ha avanzado de una verdad a otra, la iglesia (la esposa) continuó siendo reemplazada por nuevos y sucesivos ministerios una y otra vez. Y ahora que ella está en una profunda prostitución, obviamente ella ha de ser de nuevo reemplazada por un ministerio nuevo, y así ella llegará a ser fiel a nuestro Padre; que esto será llevado a cabo al quitar los pecadores de su medio. Entonces le serán dadas sus viñas y entonces ella y sus hijos vivirán en paz y seguridad. --{2LO6 27.1}
Claramente, entonces, la lascivia huirá verdaderamente, y este reavivamiento y reforma traídos por este movimiento laico logrará su obra asignada. Y así vemos que como resultado con la protesta de los hijos, toda la familia de Dios vivirá felizmente en paz y seguridad para siempre. --{2LO6 27.2}