El pueblo que difícilmente tiene probabilidad
EL PUEBLO QUE DIFÍCILMENTE TIENE PROBABILIDAD
TEXTO DE LA ALOCUCIÓN POR V. T. HOUTEFF
MINISTRO DE LOS D. ADVENTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA
EL SÁBADO, 24 DE ENERO DE 1948
CAPILLA DEL MONTE CARMELO
WACO, TEXAS
El texto de nuestro tema para esta tarde se encuentra en Proverbios 29:18 --{2LO24 14.3}
Pro. 29:18 – “Sin profecía el pueblo se desenfrena [perece, en Inglés]; mas el que guarda la ley es bienaventurado.”
--{2LO24 14.4}
Al comienzo de nuestro estudio averigüemos hasta que grado esta escritura ha sido cumplida. Recordemos que en los días de Moisés los egipcios no tenían visión, pero los hebreos si tuvieron una visión y un profeta para interpretar la visión. Con este don entre ellos cuando vinieron contra el Mar Rojo los hebreos fueron preservados, pero los egipcios perecieron. “El hombre sabio,” vemos, no estaba adivinando cuando dijo “Sin profecía el pueblo perece.” --{2LO24 14.5}
Supongamos que aunque el pueblo tuviera una visión, pero no un intérprete para la visión. ¿Qué entonces? Veamos: Recuerdan que Nabucodonosor, rey de Babilonia, tuvo una visión de noche pero no tenía un intérprete, no, ni uno entre todos sus hombres sabios en el reino. Por consiguiente como ellos eran incapaces de interpretar su visión (Dan. capítulo 2), se decretó que ellos debían ser muertos, y ellos hubieran perecido si Daniel, el hombre de Dios, no hubiera estado en la tierra para interpretar la visión del rey. --{2LO24 14.6}
También Faraón tuvo una visión pero no tenía intérprete. Y si José no hubiera estado en la tierra de Egipto para interpretar la visión del rey, los egipcios y todo el mundo antiguo hubiera perecido durante los siete años de hambre. Vemos que lo que la Biblia dice, es cien por ciento verdadero. --{2LO24 15.1}
Ahora permítanme hacerles una simple pregunta. Si el pueblo sin una visión y sin un intérprete perece, ¿cómo entonces tendrán la visión y el intérprete? San Pedro da la clave. --{2LO24 15.2}
2 Ped. 1:19, 20 – “Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar obscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones; entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada.”
--{2LO24 15.3}
Aquí se nos dice que la profecía, una visión, es la prueba decisiva por la cual juzgar lo que la Verdad bíblica quiere decir; es decir, si la cosa no está en profecía, si no hay visión de que ésta se encuentra en los escritos de los profetas, entonces no hay verdad en ella. Si, las visiones de los profetas han de ser nuestras visiones si hemos de ser preservados. Él declara que la profecía no puede ser de interpretación privada más de lo que fueron las visiones de Nabucodonosor y de Faraón, que los hombres sabios de cualquier pueblo no son capaces de interpretar las profecías secretas de Dios. --{2LO24 15.4}
2 Ped. 1:21 – “Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.”
--{2LO24 15.6}
Esto es exactamente porque la profecía no puede ser de particular interpretación, no sin el Espíritu que dictó las profecías a los hombres santos de la antigüedad. Así es que entonces, las profecías no son interpretadas por la voluntad de los hombres, sino por el Espíritu de Verdad, “el Espíritu de Profecía,” el mismo Espíritu que dictó las profecías. Esto, vemos, no es idea mía. Es el lenguaje claro de la Biblia. Pero quizá todavía hay duda en sus mentes, y si es así haríamos bien en hacerle otra prueba a la Biblia. --{2LO24 16.1}
Por lo tanto, consideremos de nuevo los reyes de Babilonia y de Egipto. Ambos reyes dieron la oportunidad a sus hombres sabios para interpretar algunas de las cosas de las cuales ahora encontramos en la Biblia. Los reyes de esas tierras antiguas dieron a sus hombres sabios no sólo la oportunidad de atraerlos con ricas recompensas por interpretar las visiones, sino aun amenazarlos de muerte si fracasaban en hacerlo. Esto es verdad especialmente en Babilonia. Sus hombres sabios fracasaron y aun abierta y sabiamente admitieron que revelar las cosas secretas de Dios no eran sus negocios. --{2LO24 16.2}
¿No son estas pruebas suficientemente fuertes para convencer a algunos de ustedes que las cosas secretas de Dios, tales como las profecías ocultas, no son reveladas por hombres finitos, –no, ni siquiera por el diablo, que cuando Dios quiere que una cosa sea secreta, permanece oculta hasta que Él mismo la revela? Entonces cuando es revelada todos han de saber que Dios mismo está obrando. Por consiguiente ¿no se están haciendo insensatos los hombres sabios de hoy al ventilar sus interpretaciones privadas de las Escrituras no reveladas? --{2LO24 16.3}
Es bastante difícil para la mente promedio admitir que está equivocada, entonces por favor dígame ¿cuán fácilmente nuestros hombres sabios admitirán sus errores, quienes piensan de sí mismos mantenerse sin par? Porque eso es exactamente lo que deben hacer a sus audiencias si ellos mismos han de aceptar alguna vez las profecías cuando son reveladas por el mismo Espíritu Santo. Y si ellos no desisten de sus interpretaciones privadas y toman la interpretación del Espíritu, ¿no pecarán contra el Espíritu Santo? --{2LO24 16.4}
A los hombres sabios de Caldea y Egipto no se les permitió avanzar en sus ideas privadas en cuanto a lo que podrían significar las visiones del rey, así que al último fue un asunto fácil para ellos decir “no sabemos.” Pero no fue del todo fácil para los sacerdotes, los escribas y los fariseos en los días de Cristo retractarse de lo que le habían enseñado al pueblo, y tampoco será fácil para los intérpretes privados de hoy, aunque sepan que tal confesión honesta y penosa los haría grandes héroes. --{2LO24 17.1}
Las interpretaciones privadas de hoy han dañado y confundido al mundo más que en ningún otro tiempo. Mire al mundo de hoy hecho pedazos en sectas. Han separado al cristianismo en cientos de sectas, pedazos de todos tamaños, uno en desacuerdo con el otro. ¿Quién puede decir que sus diversas interpretaciones privadas de las Escrituras son inspiradas, confiables, o capaces de servir para algo sino para causar que los cristianos riñan y discutan entre sí sobre teorías y doctrinas? ¿Están estos presuntuosos intérpretes de las Escrituras trayendo a los cristianos a un acuerdo, capacitándolos para un segundo Pentecostés? ¿O los están dividiendo e incapacitando? ¿No se están haciendo insensatos a los ojos del mundo no-cristiano? Es claro ver que ni siquiera son tan sabios como los hombres sabios de los días de José o del tiempo de Daniel. Suena fuerte, lo se, pero sería peor dejarlos durmiendo sin hacer algo para despertarlos. Nadie puede mirar un hombre ciego caminando en un puente abierto sin hacer algo para prevenirlo de caer precipitadamente al río. Si ellos no abren sus ojos ahora, entonces ¿quién puede decir que no son el pueblo que difícilmente tiene una esperanza? --{2LO24 17.2}
Sus interpretaciones teóricas de las Escrituras están fomentando discordias dentro de toda denominación y ¡al mismo tiempo sus adeptos oran y hablan de haber recibido o de esperar recibir el don del Espíritu! Ellos oran, no para tener el don de interpretación inspirada, no para tener sus interpretaciones privadas corregidas, o para conocer la Verdad más completamente, sino que ¡oran para recibir el don de hacer milagros! Si, eso es todo lo que ellos buscan. ¡Qué presunción! ¡Y qué insulto a la Inteligencia! --{2LO24 18.1}
Milagros, ¿con qué propósito? –Por ningún otro que confundir aún a una más grande multitud con sus interpretaciones privadas. Ellos pueden engañar a los hombres pero yo les digo, ellos nunca pueden engañar a Dios, y es mejor que no lo sigan intentando más. --{2LO24 18.2}
Ahora, supongamos que tenemos una visión y también un intérprete, pero no tenemos fe. ¿Qué entonces? –si tal es nuestro caso, entonces creo que en tal estado desventurado de la mente sería mejor que no tuviéramos ni visión ni intérprete, porque si tenemos ambos una visión y un intérprete, pero no tenemos fe, seríamos responsables de rechazar a ambos, y así pecar doblemente contra el Espíritu Santo. Entonces nos encontraríamos aun más en una situación poco envidiable de la que estuvieron los judíos. --{2LO24 18.3}
No hay perdón por pecar contra el Espíritu Santo, contra la Inspiración, porque una vez rechazada no hay nada más por lo cual un pecador pueda ser traído a Cristo. Por consiguiente no hay más esperanza para el tal, porque no hay nada más que el cielo pueda hacer para despertarle a su pobreza, y de ahí que no hay más remedio, no hay perdón de pecado. --{2LO24 19.1}
Pero uno puede decir, “Yo tengo fe en la Biblia, en la Palabra de Dios.” Podemos tener aun más fe en la Biblia que la que tuvieron los judíos, pero si tal fe unilateral fue un daño para los judíos, entonces ¿qué sería para otros? No, los judíos no fueron condenados por falta de fe en la Biblia, sino por no tener fe en los mensajeros de Dios, por no tener fe en los profetas y sus interpretaciones de las Escrituras. Además, tener fe en la Biblia sin tener fe en el Intérprete que dictó la Biblia es tan bueno como admitir que el pan es en verdad el sostén de la vida, sin embargo, rehusarse a tomar un bocado de él. Veamos que tiene que decir la Biblia misma con respecto a tales desventurados: --{2LO24 19.2}
2 Cró. 36:14-17 – “También todos los principales sacerdotes, y el pueblo, aumentaron la iniquidad, siguiendo todas las abominaciones de las naciones, y contaminando la casa del Señor, la cual Él había santificado en Jerusalén. Y el Señor el Dios de sus padres envió constantemente palabra a ellos por medio de sus mensajeros, porque Él tenía misericordia de su pueblo y de su habitación. Mas ellos hacían escarnio de los mensajeros de Dios, y menospreciaban sus palabras, burlándose de sus profetas, hasta que subió la ira del Señor contra su pueblo, y no hubo ya remedio. Por lo cual trajo contra ellos al rey de los caldeos, que mató a espada a sus jóvenes en la casa de su santuario, sin perdonar joven ni doncella, anciano ni decrépito; todos los entregó en sus manos.”
--{2LO24 19.3}
Vemos que los transgresores aquí mencionados no fueron dejados a la matanza simplemente porque eran grandes pecadores; Dios tuvo compasión de ellos mientras pecaban, y envió mensajeros para corregirlos e iluminarlos. Pero después que rechazaron sus mensajes y mataron a sus mensajeros llenos del Espíritu, pecaron contra el Espíritu Santo, entonces no había nada más que Él pudiera hacer sino dejar que sus enemigos los destruyeran. --{2LO24 20.1}
Consideremos otro ejemplo, éste en el tiempo de Jesús. Los judíos en su tiempo tenían una fe aun más grande en las Escrituras que cualquiera antes que ellos. Con las Escrituras acusaron, probaron y crucificaron al Señor. En lo que ellos no tenían fe era en las interpretaciones de Jesús de las Escrituras. Como resultado, algunos años más tarde su ciudad fue destruida y todo el que se encontraba allí fue quemado como ratas, solamente porque fracasaron en prestar atención a las instrucciones de Jesús: --{2LO24 20.2}
“Pero cuando viereis a Jerusalén rodeada de ejércitos, sabed entonces que su destrucción ha llegado. Entonces los que estén en Judea, huyan a los montes; y los que en medio de ella, váyanse; y los que estén en los campos, no entren en ella. Porque estos son días de retribución, para que se cumplan todas las cosas que están escritas.” Luc. 21:20-22 --{2LO24 20.3}
Vemos que sin visión el pueblo perece. Y también sin un intérprete y sin fe del mismo modo perece. --{2LO24 20.4}
Y por eso es que “el Espíritu de Profecía” es una necesidad absoluta para el pueblo de Dios en todas las generaciones. --{2LO24 20.5}
Sabemos que hoy el laodiceanismo está en una situación peor que cualquier pueblo en cualquier otro tiempo porque por protestar que no hay necesidad de profetas, ninguna necesidad de más verdad, ellos ya los han rechazado, si, en realidad los han matado. Si ellos no esperan más verdad y si Jesucristo mismo viniera con más verdad ¿no lo crucificarían también? Se que no estoy haciendo una declaración irreflexiva, ni tampoco exagerando, y también se que la Biblia me sostendrá en lo que estoy diciendo, de otra manera no lo diría. --{2LO24 21.1}
Ya hemos visto ahora que las Escrituras no son de interpretación privada y que el cristianismo como un todo no tiene intérpretes inspirados, divinamente asignados, ni siquiera pretende tener uno, y que el pueblo está tan confundido como estaban los edificadores insensatos de la torre de Babel cuando su lenguaje fue reemplazado con diversos lenguajes. --{2LO24 21.2}
Ahora, si esta es la Verdad que hace a uno libre, y si viene únicamente a través de la Inspiración, y si el cristianismo fracasa en reconocer esto y no le da así oportunidad a Dios de salvarlo, entonces, ¿cual ha de ser su suerte, y también la suerte de la iglesia misma? Usted sabe la respuesta. --{2LO24 21.3}
La raíz de este error, no obstante que brota del corazón de la iglesia que profesa ser la luz del mundo, porque ella se siente rica y enriquecida, sin necesidad, ni de Verdad y ni de profetas a pesar del hecho que el Señor mismo le dice que es desventurada, miserable, pobre, ciega, y desnuda, y a punto de ser vomitada, y en necesidad de todo (Apoc. 3:14-18). Pasar por alto esta acusación y todavía decir que no tenemos necesidad de nada es insultar al Señor y acusar a Dios de haber abandonado la tierra, la Iglesia y al pueblo, y dejarlos para que todos hagan lo mejor que puedan en su confusión y seguridad carnal, esperando levantarse a sí mismos de su engaño por las correas de sus botas. --{2LO24 21.4}
Hay solamente una cosa que su pueblo ha sido enseñado a tener cuidado, y eso es cuidarse de falsos profetas, y como el pueblo no se da cuenta que no puede haber falsos donde no hay verdaderos, ¿no puede usted ver la contradicción de ellos? “¡Qué mayor engaño puede penetrar en las mentes humanas que la confianza de que en ellos todo está bien cuando todo anda mal!” –Joyas de los Testimonios, Tomo 1, p. 327. Digo terrible, y significa terrible, porque si siguen imaginando que son ricos y se han enriquecido, y que de ninguna cosa tienen necesidad, mientras están destituidos de todo, ciertamente serán “vomitados.” --{2LO24 22.1}
Si despiertan a su pobreza, este será el milagro más grande desde el comienzo del mundo. Digo que será el más grande porque no sienten necesidad de la ayuda de Dios a través de la Inspiración, no esperan nada, están prejuiciados, son desconfiados y están temerosos de todo el que no esté de acuerdo con sus ideas preconcebidas. Por consiguiente son aun más difíciles de alcanzar con la Verdad salvadora de hoy que lo que fueron los judíos de ayer. --{2LO24 22.2}
¿Permanecerá la Iglesia para siempre en su auto-engaño o despertará a su gran necesidad? Tendremos estas preguntas contestadas si vamos al Apocalipsis: --{2LO24 22.3}
“Pero la tierra ayudó a la mujer, pues la tierra abrió su boca y tragó el río que el dragón había echado de su boca. Entonces el dragón se llenó de ira contra la mujer; y se fue a hacer guerra contra el resto de la descendencia de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo. . . porque el testimonio de Jesús es el espíritu de profecía.” Apoc. 12:16, 17; 19:10. --{2LO24 22.4}
Aquí está la respuesta de la Biblia la cual dice que habrá un pueblo que tendrá el Testimonio de Jesucristo al tiempo que la tierra traga el río, –los hipócritas. Y puesto que este incidente es aun futuro, muestra que ha de haber un profeta en la Iglesia, porque la interpretación de la Biblia del “Testimonio de Jesucristo,” es “el Espíritu de Profecía” (Apoc. 19:10). Notaremos que la primera parte del capítulo 19 que explica que el Espíritu de Profecía es traído a ellos por un hombre, un “siervo,” y que los que lo reciben sienten que lo adoran a él, pero él los dirige a adorar a Dios y no al hombre. --{2LO24 23.1}
El remanente que es dejado, los santos que no fueron sorbidos por el río del dragón cuando la tierra abrió su boca, notamos que tienen el “testimonio de Jesucristo,” el Espíritu viviente de la Profecía activo en su medio. Por lo tanto, la Iglesia no dormirá para siempre, el verdadero pueblo de Dios despertará a su pobreza, se beneficiarán de esta animadora llamada, pero el río del dragón llenará las entrañas de la tierra. --{2LO24 23.2}
Nadie se engañe a sí mismo pensando que la Biblia misma es el Espíritu de Profecía activo. Seamos el pueblo verdadero de Dios, pensadores lógicos, no buscadores de anzuelos en que engancharse. Sabemos que la Biblia, sin el canal humano es tan inactiva como si sólo fuera tinta y papel. Además, también el Espíritu separado del hombre es inactivo: También Él obra a través del agente humano. De aquí que sin un intérprete inspirado las profecías secretas y el Espíritu que las revela son inactivos. Además, ¿cómo podría decirse de un grupo en particular que tiene el Espíritu de Profecía, cuando todas las sectas en el cristianismo tienen la Biblia? --{2LO24 23.3}
El remanente, quien tiene el Espíritu de Profecía entre ellos es dirigido a guardar los mandamientos de Dios, mientras que el resto del mundo, por la influencia del dragón, los persigue. En esta luz, otra vez se ve que un remanente escapará del actual auto-engaño que ha confundido a todo el mundo cristiano. --{2LO24 24.1}
Finalmente, ¿qué podría ser el río del dragón que procede de su boca sino los intérpretes de las Escrituras impulsados por el dragón a través de los cuales él espera causar que la iglesia sea destituida? --{2LO24 24.2}
Verdaderamente, los profetas que se han nombrado a sí mismos en el Israel de hoy son más en número que los profetas en el tiempo de Elías. Aquí hay un hecho que sólo las personas sordas y ciegas tratarían de negar. No, no me es placentero revelar esta verdad, lo hago sólo porque debo hacerlo. Dios quiere que su pueblo tenga la Verdad, y no tengo otra alternativa sino decirlo. --{2LO24 24.3}
Este río contra el cual la Iglesia perpetua está luchando para seguir su camino, se nos dice que será sorbido por la tierra. Será quitado como fueron los profetas que se eligieron por sí mismos en el tiempo de Moisés: a saber, Coré, Datán y Abiram, “Príncipes de la congregación, de los del consejo, varones de renombre.” Núm. 16:2. Estos y todos sus seguidores y simpatizantes perecieron. “Abrió la tierra su boca, y los tragó a ellos, a sus casas, a todos los hombres de Coré, y a todos sus bienes” Núm. 16:32. --{2LO24 24.4}
Aquí tenemos el tipo y el ejemplo también, mostrando que lo que fue hecho en el tiempo de Moisés con los hombres que trataron de promoverse a sí mismos al oficio del Espíritu de Profecía, será hecho con los hombres que aspiran al mismo oficio en nuestro tiempo. Ellos son el pueblo que difícilmente tiene esperanza. --{2LO24 25.1}
Así es que los que son llamados a enseñar lo que el Espíritu de Profecía les revela no deben aspirar a interpretaciones privadas no inspiradas de las Escrituras. Si lo hacen, ellos y todos los que los siguen tendrán su recompensa a menos que se arrepientan. --{2LO24 25.2}
Gál.3:1-3; 4:16 – “¡Oh gálatas insensatos! ¿quién os fascinó para no obedecer a la verdad. . . ? ¿Habiendo comenzado por el Espíritu, ahora vais a acabar por la carne?” “¿Me he hecho, pues, vuestro enemigo, por deciros la verdad?” --{2LO24 25.3}
Permítanme mostrarles otra vez al pueblo que está en el más grande peligro de fracasar en servir al Señor como el Espíritu dirige. Esto lo podemos ver de nuevo de los ejemplos del pasado. Puedo ir tan lejos hasta Caín y Abel. Caín fue el primogénito de Adán, y de acuerdo a la regla de la Biblia, el primogénito había de ser el líder, el sacerdote. De esta experiencia sabemos que él, el líder, el ministro en la familia, fue el primero en la historia que adoró de acuerdo a sus propias interpretaciones privadas de la religión. Y por el fracaso de Abel en seguir la manera de adoración de Caín, Abel fue muerto por las propias manos de Caín. --{2LO24 25.4}
A continuación los llevaré al tiempo de Abraham. Sabemos que Ismael fue el primogénito de Abraham e Isaac su segundo. Ismael el primogénito, nacido de la carne, persiguió a Isaac que nació del Espíritu. --{2LO24 26.1}
Luego, llegando hasta los gemelos de Isaac, Esaú y Jacob: Esaú era el hombre poderoso del día y el primogénito en el hogar; él era el primogénito para guiar en el servicio de Dios. Pero también él estaba más interesado en cazar que en la obra del Espiritu. Él puso muy poco valor en la obra del Espíritu que vendió su primogenitura por un plato de lentejas. Y a pesar de esto, todavía esperaba la bendición prometida de su padre, pero ¡la Providencia intervino! Cuando descubrió su pérdida, por supuesto, él como el Caín antiguo, buscó matar a su hermano. --{2LO24 26.2}
En el tiempo de Moisés encontramos el mismo espíritu obrando por medio de los primogénitos, porque todos los que eran de veinte años o mayores cuando salieron de Egipto, perecieron en el desierto, con la excepción de Caleb y Josué. --{2LO24 26.3}
De estos ejemplos en los días de nuestros tipos, vemos que los que son primeros y los que son poderosos, cuya primogenitura en la iglesia les da el privilegio de dirigir al pueblo, están en el más grande peligro de errar o perder sus almas. Pero con semejante cuadro tan claro ante ellos por medio de estos ejemplos bíblicos, esperamos que se vuelvan en contra del dragón antiguo y salgan de sus garras. Si ellos salen de ellas, verdaderamente serán considerados como hombres valientes de Dios como fueron los tres hebreos después que salieron del horno de fuego y como Daniel después de salir del foso de los leones. --{2LO24 26.4}
“Dejaos del hombre, cuyo aliento está en su nariz; porque ¿de qué es él estimado?” Isa. 2:22. Hermano, hermana la Verdad Inspirada es lo único que cuenta, y solamente cuando usted mismo investiga y personalmente decide tomar su posición aunque todo el mundo la rechace y se aparte de usted. Por lo tanto no nos dejemos llevar más por la marea como una piedrecilla con las olas del mar. Debemos ser hombres y mujeres de resistencia y estabilidad si hemos de seguir a Dios y su Verdad. --{2LO24 26.5}
Ahora hemos visto claramente que los que tomaron tal posición como la Verdad aquí presenta, fueron los héroes de Dios en el pasado, y tales deben ser sus héroes de hoy, aunque sean perseguidos, burlados y arrojados como lo fueron los que fueron antes de ellos. --{2LO24 27.1}
La victoria sobre cada fracaso puede ser ganada por la visión divina, la interpretación divina, la fe divina. Vemos que estas tres son inseparables y solamente estas tres guían a Cristo y a la vida eterna. Esto es verdaderamente la justicia de Cristo no empañada con el oropel de los hombres. --{2LO24 27.2}
Por supuesto, tendrá que enfrentar la oposición, pero así lo hizo el Señor mismo. ¿Es usted más grande que Él? Sin embargo, hay una cosa que los enemigos de la Verdad no pueden hacer, y eso es, ellos no pueden ganar un argumento contra la Verdad, que sólo dan algo por bueno. Su único propósito es quitarle la perla de gran precio. Y su único propósito por lo tanto debiera ser mantenerla aunque usted tenga que perder todo lo demás si intenta prevenir al pueblo que difícilmente tiene esperanza y ganar en la carrera con los justos. Visión Divina, intérprete lleno del Espíritu y una fe que no falla, es lo que todos necesitamos tener, no sea que todos perezcamos. --{2LO24 27.3}