Cinco hombres que matan después que otro pone una Señal
MEDITACIÓN PARA LA ORACIÓN DE APERTURA
Trayendo Nuevas Verdades --{1LO52 14.1}
Daré lectura de “Palabras de Vida del Gran Maestro,” página 10, comenzando en el cuarto párrafo – --{1LO52 14.2}
“En la primera parte de su ministerio, Cristo había hablado a la gente en palabras tan claras, que todos sus oyentes podían haber entendido las verdades que los hubieran hecho sabios para la salvación. Pero en muchos corazones la verdad no había echado raíces y había sido prestamente arrancada. ‘Por eso les hablo en parábolas dijo Él, porque viendo no ven, y oyendo no oyen, ni entienden’ . . . Jesús quiso incitar el espíritu de investigación. Trató de despertar a los descuidados, e imprimir la verdad en el corazón. . .” --{1LO52 14.3}
En el tiempo de Cristo era difícil traer verdades nuevas al pueblo como también lo es hoy. Jesús usó todos los medios posibles para interesar al pueblo en la Verdad Presente de su tiempo, pero sabemos cuán pequeños logros Él tuvo sólo unos pocos del pueblo común. Los así llamados eruditos de ese tiempo amargamente se opusieron a Él y dedicaron su tiempo y los medios para acusarlo falsamente de una y de otra cosa. En la clase de mundo en que vivimos no podemos esperar que la gente sea diferente hoy de lo que fue en su tiempo. Por lo tanto, oremos para que nos mantengamos siempre despiertos, que cada día que pasa continuemos estando insatisfechos con nuestros lo- gros, no sea que también seamos encontrados faltos regresando al laodiceanismo. Oremos para que nuestros corazones estén siempre abiertos a su verdad progresiva y que nunca perdamos el hambre por el “alimento a su tiempo.” --{1LO52 14.4}
CINCO HOMBRES QUE MATAN DESPUÉS QUE OTRO PONE UNA SEÑAL
Texto de la Alocución por V. T. Houteff, Ministro de los Davidianos Adventistas del Séptimo Día --{1LO52 15.1}
El Sábado, 2 de agosto de 1947 Capilla del Monte Carmelo Waco, Texas --{1LO52 15.2}
El tema de nuestro estudio en esta tarde se encuentra en el capítulo noveno de Ezequiel. Comencemos con – --{1LO52 15.3}
Eze. 9:1-6 – “Clamó en mis oídos con gran voz, diciendo: Los verdugos de la ciudad han llegado, y cada uno trae en su mano su instrumento para destruir. Y he aquí que seis varones venían del camino de la puerta de arriba que mira hacia el norte, y cada uno traía en su mano su instrumento para destruir. Y entre ellos había un varón vestido de lino, el cual traía a su cintura un tintero de escribano; y entrados, se pararon junto al altar de bronce. Y la gloria del Dios de Israel se elevó de encima del querubín, sobre el cual había estado, al umbral de la casa; y llamó el Señor al varón vestido de lino, que tenía a su cintura el tintero de escribano, y le dijo el Señor: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella. Y a los otros dijo, oyéndolo yo: Pasad por la ciudad en pos de él, y matad; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno; pero a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no os acercaréis; y comenzaréis por mi santuario. Comenzaron, pues, desde los varones ancianos que estaban delante del templo.” --{1LO52 15.4}
Notemos que al mandato del Señor, los ángeles a cargo han de matar a los pecadores en Jerusalén (la iglesia), no en el mundo. Solamente son dejados los que aborrecen las abominaciones, aquellos que reciben la marca por gemir y clamar en contra de los errores. --{1LO52 16.1}
El día que Ezequiel tuvo esta visión en Babilonia, Jerusalén ya había estado en cautiverio y vacía de su pueblo por años. Ver Ezequiel 1:1, 8:7. Ninguna semejante purificación o limpieza como la aquí des- crita alguna vez sucedió en el tiempo de Ezequiel o en los anales de la iglesia desde su tiempo. Por lo tanto, es cierto que la profecía está aún por cumplirse. --{1LO52 16.2}
Además, la Inspiración en nuestro tiempo pone esta predicción de purificación aún en el futuro y da esta explicación: --{1LO52 16.3}
“Los que no sienten pesar por su propia decadencia espiritual ni lloran sobre los pecados ajenos quedarán sin el sello de Dios. El Señor ordena a sus mensajeros, los hombres que tienen las armas de matanza en la mano: ‘Pasad por la ciudad en pos de él, y herid; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad viejos, mozos y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno: mas a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no llegaréis; y habéis de comenzar desde mi santuario. Comenzaron pues desde los varones ancianos que estaban delante del templo.’ --{1LO52 16.4}
“Aquí vemos que la iglesia, el santuario del Señor, era la primera en sentir los golpes de la ira de Dios. Los ancianos, aquellos a quienes Dios había brindado gran luz, que se habían destacado como guardianes de los intereses espirituales del pueblo, habían traicionado su cometido.” –Testimonios Para la Iglesia, Tomo 5, p. 196. --{1LO52 16.5}
Los enemigos de Dios han tomado posesión de las iglesias, pero pronto los papeles cambiarán y los siervos del diablo no serán más, caerán y no serán hallados. --{1LO52 17.2}
Note que el pueblo está engañado por los ancianos que han traicionado su cometido. Sabemos bien que los profetas, los apóstoles, Jesucristo y los reformadores, en su tiempo todos fueron injuriados, vituperados como “vástagos” pero agradecemos a Dios de que estos “vástagos” y la Verdad, y no las cumbres muertas, triunfaron. --{1LO52 17.3}
“. . . habían [los ancianos] asumido la actitud de que no necesitamos esperar milagros ni la señalada manifestación del poder de Dios como en tiempos anteriores.” –Testimonios para la Iglesia, Tomo 5, p. 196. --{1LO52 17.4}
¿No es esta hoy la posición de los ancianos? ¿No están ellos clamando paz y seguridad? ¿No están ellos predicando que Ezequiel nueve no ha de acontecer ahora y que no sucederá en la iglesia y que este mensaje es una falsa alarma? ¿Qué es lo que tomará para despertar a un soñador durmiente? Están soñando que– --{1LO52 17.5}
“Los tiempos han cambiado. Estas palabras fortalecen su incredulidad, y dicen: El Señor no hará bien ni mal. Es demasiado misericordioso para cas- tigar a su pueblo.” --{1LO52 17.6}
Por supuesto que la iglesia es su objeto más preciado en la tierra, y esta es exactamente la razón por qué Él tiene que purificarla, y es por esto que Él ha de matar a los impíos que se encuentran en medio de ella y sellar (preservar) al penitente para que Él pueda tener una iglesia limpia, que no tenga “mancha ni arruga ni cosa semejante.” Efe. 5:27. --{1LO52 17.7}
“Así el clamor de paz y seguridad es dado por hombres que no volverán a elevar la voz como trompeta para mostrar al pueblo de Dios sus transgresiones y a la casa de Jacob sus pecados. Estos perros mudos que no querían ladrar, son los que sienten la justa venganza de un Dios ofendido. Hombres, jóvenes y niñitos, todos perecen juntos.” –Testimonios para la Iglesia, Tomo 5, p. 196. --{1LO52 18.1}
Continuando más allá, el Espíritu de Dios dice: “¿Quiénes siguen el consejo de Dios en este tiempo? ¿Son los que excusan virtualmente los yerros de entre el profeso pueblo de Dios, y quienes murmuran en su corazón, si no abiertamente, contra los que quisieran reprender el pecado? ¿Son aquellos que se les oponen y simpatizan con los que contemporizan con el mal? No, en verdad. A menos que se arrepientan, y dejen la obra satánica de oprimir a los que tienen la preocupación de la obra, y de dar la mano a los pecadores de Sion, nunca recibirán el sello de la aprobación de Dios. Caerán en la destrucción general de los impíos, representada por la obra de los hombres que llevaban armas. Nótese esto con cuidado: Los que reciban la marca pura de la verdad, desarrollada en ellos por el poder del Espíritu Santo y representada por el sello del hombre vestido de lino, son los que ‘gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen’ en la iglesia. Su amor por la pureza y el honor y la gloria de Dios es tal, y tienen una visión tan clara del carácter excesivamente pecaminoso del pecado, que se los representa agonizando, suspirando y llorando. Léase el capítulo noveno de Ezequiel.” Luego dice el Espíritu: --{1LO52 18.2}
“Pero la matanza general de todos los que no ven así el amplio contraste entre el pecado y la justicia, y no tienen los sentimientos de aquellos que siguen el consejo de Dios y reciben la señal, está descrita en la orden dada a los cinco hombres con armas: ‘Pasad por la ciudad en pos de él, y herid; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad viejos, mozos y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno: mas a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no llegaréis; y habéis de comenzar desde mi santuario.’ ” –Joyas de los Testi- monios, Tomo 1, pp. 335-336. --{1LO52 18.3}
Aquí se muestran dos clases en la iglesia los fieles y los infieles los que miran el pecado como pecado y los que lo ven como una diversión. También se ve aquí que la iglesia tiene una obra final, una obra que tiene que ser hecha especialmente para ella y no para el mundo. En adición a esto, revela que la obra final para la iglesia es el sellamiento de los 144,000. Que ellos, por lo tanto, son los que sienten más profundamente los errores entre el pueblo profeso de Dios. --{1LO52 19.1}
Eze. 9:7-11 – “Y les dijo: Contaminad la casa, y llenad los atrios de muertos; salid. Y salieron, y mataron en la ciudad. Aconteció que cuando ellos iban matando y quedé yo solo, me postré sobre mi rostro, y clamé y dije: ¡Ah, Señor Dios! --{1LO52 19.2}
¿Destruirás a todo el remanente de Israel derramando tu furor sobre Jerusalén? Y me dijo: La maldad de la casa de Israel y de Judá es grande sobremanera, pues la tierra está llena de sangre, y la ciudad está llena de perversidad; porque han dicho: Ha abandonado el Señor la tierra, y el Señor no ve. Así, pues, haré yo; mi ojo no perdonará, ni tendré misericordia; haré recaer el camino de ellos sobre sus propias cabezas. Y he aquí que el varón vestido de lino, que tenía el tintero a su cintura, respondió una palabra, diciendo: He hecho conforme a todo lo que me mandaste.” --{1LO52 19.3}
¿Cuándo se efectuará esta separación de los impíos de entre los justos? Jesús la coloca en el fin del mundo. Él dice: --{1LO52 20.1}
“Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero. . . Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces; y una vez llena, la sacan a la orilla; y sentados, recogen lo bueno en cestas, y lo malo echan fuera.” Mat. 13:30, 47, 48. --{1LO52 20.2}
Así como la cizaña es quemada, así el pez malo es echado fuera. Esta es la manera en que el Reino ha de venir, dice el Señor. ¿Y qué es la cosecha si no el Juicio de los vivos? la obra que separa lo uno de lo otro. --{1LO52 20.3}
“El verdadero pueblo de Dios,” dice la Inspiración, “que toma a pecho el espíritu de la obra del Señor y la salvación de las almas, verá siempre al pecado en su verdadero carácter pecaminoso. Estará siempre de parte de los que denuncian claramente los pecados que tan fácilmente asedian a los hijos de Dios. Especialmente en la obra final que se hace en favor de la iglesia, en el tiempo del sellamiento de los ciento cuarenta y cuatro mil que han de subsistir sin defecto delante del trono de Dios, sentirán muy profundamente los yerros de los que profesan ser hijos de Dios. Esto lo expone con mucho vigor la ilustración que presenta el profeta acerca de la última obra, bajo la figura de los hombres que tenían sendas armas destructoras en las manos.” –Joyas de los Testimonios, Tomo 1, p. 335. ¿De qué lado está usted? --{1LO52 20.4}
El asunto de los 144,000 se manifiesta ahora mucho más luminoso que nunca antes. Ahora podrán ver más claramente que aquellos que escapan de la matanza predicha en Ezequiel nueve, son los 144,000, los siervos futuros de Dios, los primeros frutos de la siega, resultando de la purificación del santuario (iglesia), la obra del juicio investigador de los vivientes. Por consiguiente, esta obra y esta Verdad, son las más importantes de hoy día y deberían ser oídas sinceramente si es que uno espera recibir la marca y el sello y escapar de la matanza, sobreviviendo al día grande y terrible del Señor. Nuestra negligencia en gemir y clamar por las abominaciones en la iglesia significaría nuestra perdición eterna. No debemos atrevernos a permitir que nin- guna cosa desvíe nuestra atención de esta grande y gloriosa obra para los santos, pero la más terrible y deshonrosa para los pecadores. Esta obra “debiera absorber completamente la mente y la atención” – Primeros Escritos, p. 118. Nada debe permitirse que interfiera con su bienestar eterno. No, ni por un momento, porque el día está pasando. ¿Permitirá que amigos, familiares, esposos, esposas se pierdan con usted si esta verdad falla para convencerlo a usted mismo y a ellos? Sin embargo la promesa para los fieles es: --{1LO52 20.5}
“Nótese esto con cuidado,” aconseja el Espíritu de Dios: “Los que reciban la marca pura de la verdad, desarrollada en ellos por el poder del Espíritu Santo y representada por el sello del hombre ves- tido de lino, son los que ‘gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen’ en la iglesia. Su amor por la pureza y el honor y la gloria de Dios es tal, y tienen una visión tan clara del carácter excesivamente pecaminoso del pecado, que se los representa agonizando, suspirando y llorando. Léase el capítulo noveno de Ezequiel.” –Joyas de los Testimonios, Tomo 1, p. 336. --{1LO52 21.1}
¿Quiénes son los verdaderos adventistas del séptimo día en este momento decisivo? – ¿Aquellos que resisten la obra final para la iglesia? ¿O los que tienen puestos en ella sus corazones y sus almas? Hagamos frente a la situación honesta y sinceramente. Unjamos nuestros ojos con este colirio celestial para que podamos ver y saber lo que es Verdad. Solamente los que se arrepienten y promueven el mensaje de la hora más bien que pelear en contra de él, estarán con el Cordero en el Monte de Sion. --{1LO52 21.2}
Permítanme leer nuevamente: --{1LO52 21.3}
“En el tiempo en que su ira se manifieste con castigos, estos humildes y consagrados discípulos de Cristo se distinguirán del resto del mundo por la angustia de su alma, expresada en lamentaciones y lloros, reproches y amonestaciones. Mientras que otros procuran arrojar un manto sobre el mal existente,y excusarla gran impiedadque prevalece por doquiera, los que tienen celo por el honor del Señor y amor por las almas no callarán para obtener el favor humano. Sus almas justas se afligen día tras día por las obras y conversaciones profanas de los impíos. Son impotentes para detener el torrente de la iniquidad; de ahí que se llenen de pesar y alarma. Lloran delante de Dios al ver la religión despreciada en los mismos hogares de aquellos que han tenido gran luz. Se lamentan y afligen sus almas porque en la iglesia hay orgullo, avaricia, egoísmo y engaño de casi toda clase. El Espíritu de Dios, queinspiralareprensión, espisoteado, mientras triunfan los siervos de Satanás. . .” –Testimo- nios para la Iglesia, Tomo 5, pp. 195-196. --{1LO52 21.4}
Ya no sirva más a Satanás. Ya no combata más la verdad de Dios en contra de su propio interés. En estas líneas el Espíritu de Profecía ha dicho tan claramente como puede decirse, que cuando el mensaje del sellamiento sea presentado al pueblo, los siervos del diablo triunfarán temporalmente, mientras que los siervos de Dios y su Verdad por un tiempo serán hollados bajo los pies por aquellos que controlan las iglesias. Todos están bien advertidos que esta obra impía ya está en progreso: Los hermanos ministros ya están peleando en contra del mensaje en lugar de enseñarlo. Los púlpitos están ocupados por hombres que Sábado tras Sábado dirigen ataque tras ataque en contra de esta Verdad, la Verdad del Juicio de los vivos. --{1LO52 22.1}
Como al profeta del evangelio en el capítulo 66 le fue también dada luz en este tema, vayamos a él. --{1LO52 22.2}
Isa. 66:15-17, -19 –“Porque he aquí que el Señor vendrá con fuego, y sus carros como torbellino, para descargar su ira con furor, y su reprensión con llama de fuego. Porque el Señor juzgará con fuego y con su espada a todo hombre; y los muertos del Señor serán multiplicados. Los que se santifican y los que se purifican en los huertos [en lugares de adoración], unos tras otros [siguiendo a un dirigente], los que comen carne de cerdo y abominación y ratón, juntamente serán talados, dice el Señor. . . Y pondré entre ellos señal, y enviaré de los escapados de ellos a las naciones, a Tarsis, a Fut y Lud que disparan arco, a Tubal y a Javán, a las costas lejanas que no oyeron de mí, ni vieron mi gloria; y publicarán mi gloria entre las naciones.” --{1LO52 22.3}
Aquí es reiterado que la matanza se lleva a cabo en la iglesia, entre aquellos que están bien familiarizados con las cosas de Dios, tanto que aquellos que escapan son enviados a declarar su gloria y su fama entre los gentiles. Además, el mismo hecho de que los gentiles no son muertos, sino que son enseñados de Dios después que la matanza se efectúa, muestra positivamente que la matanza se lleva a cabo en la iglesia únicamente y antes que el tiempo de gracia se cierre para los gentiles. Para repetir, los que escapan de la matanza son envia-dos a predicar a los gentiles. --{1LO52 23.1}
Isa. 66:20 – “Y traerán [los escapados, dice la escritura] a todos vuestros hermanos de entre todas las naciones, por ofrenda al Señor, en caballos, en carros, en literas, en mulos y en camellos, a mi santo monte de Jerusalén, dice el Señor, al modo que los hijos de Israel traen la ofrenda en utensilios limpios a la casa del Señor.” --{1LO52 23.2}
Puesto que los 144,000 son los primeros frutos y también los siervos de Dios, y son de ambas casas antitípicas de Judá y de Israel, ellos deben ser los escapados y los enviados. Por lo tanto, aquellos a quienes ellos traigan a la casa del Señor de todas las naciones (Apoc. 7:9) deben ser los segundos frutos. Los primeros son los frutos de la iglesia ylos últimos son los frutos de los gentiles (Ver Apoc. 7:2-9). --{1LO52 23.3}
Para hacer callar la verdad, los ministros y ancianos en su impiedad e ignorancia ahora enseñan a los laicos que el tema de los 144,000 ¡es una cuestión discutida en vez de una verdad revelada! El diablo traerá esto hasta este punto para que el pueblo pueda caer bajo las armas de matanza de los ángeles ¡Qué insensatez y qué influencia tiene el diablo sobre los hombres que controlan las iglesias!
¿No están ellos engañando a los mismos elegidos, los 144,000? Este es verdaderamente el tiempo para que “venga en ayuda del Señor en contra del violento,” si ha de recibir la marca de la aprobación de Dios, y si ha de escapar de las armas de matanza de los ángeles si usted ha de ser “dejado” si ha de ser del remanente. --{1LO52 24.1}
Nunca ha sido hecho un esfuerzo tan grande en ninguna otra edad, para despertar al pueblo, como el esfuerzo de hoy día. Cientos y miles, si, millones de libros han sido esparcidos a través de toda la denominación. Esto se ha estado haciendo por más de una década. Verdaderamente ahora mismo se puede decir de la iglesia: --{1LO52 24.2}
“¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los mi- lagros que han sido hechos en vosotras, tiempo ha que se hubieran arrepentido en cilicio y en ceniza. Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para Tiro y para Sidón, que para vosotras. Y tú, Capernaum, que eres levantada hasta el cielo, hasta el Hades serás abatida; porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que han sido hechos en ti, habría permanecido hasta el día de hoy. Por tanto os digo que en el día del juicio, será más tolerable el castigo para la tierra de Sodoma, que para ti.” Mat. 11:21-24. --{1LO52 24.3}
Vemos que el diablo hoy tiene al pueblo sumido en el abismo más profundamente de lo que lo tenía en los días de Cristo o en los días de Lutero. No obstante, la victoria del Señor y la victoria de aquellos que escapan del abismo, será mucho más gloriosa. “Y les llamarán Pueblo Santo, Redimidos del Señor; y a ti te llamarán Ciudad Deseada, no desamparada.” Isa. 62:12. --{1LO52 25.1}
“He aquí sobre los montes los pies del que trae buenas nuevas, del que anuncia la paz. Celebra, oh Judá, tus fiestas, cumple tus votos; porque nunca más volverá a pasar por ti el malvado; pereció del todo.” Nahum 1:15. --{1LO52 25.2}
Notamos que los impíos en la iglesia tienen que venir finalmente a su fin. ¿Con cuál compañía estará usted? ¿Con aquellos que cierran sus ojos a esta Verdad o con los que se esfuerzan por traerla al frente? Juzgue su propio caso --{1LO52 25.3}
Cuando solicite copias extras de estas “Hojas de Otoño,” por favor diga el tomo y el número de estudio en lugar de la fecha y el título. Esto facilitará el pedido de su orden para que lo reciba sin demora. --{1LO52 25.5}