FE Y TRABAJO TRAEN DESCANSO
FE Y TRABAJO TRAEN DESCANSO
(El sermón seleccionado para esta edición de El Código Simbólico fue dado por el Hermano V.T. Houteff el 31 de marzo de 1934 y de nuevo el 16 de junio del mismo año. Así podemos ver el doble énfasis que fue dado a este asunto relacionado con la fe y la acción necesarias para --{11CS6 3.1}
permitirnos entrar en nuestro “descanso”. Obviamente, este estudio no podía ser recibido a la ligera, sino más bien tomado muy en serio por todos los Davidianos. También el hecho de que lo tenemos ahora cuando el Reino está a la mano, llamando una vez más nuestra atención, sólo sirve para subrayar el contenido de este mensaje como conteniendo valioso “alimento a su debido tiempo” que nosotros como pueblo lo necesitamos mucho. Que puedan ser estas necesidades completamente suplidas, mientras podamos estudiar cuidadosamente y con oración este mensaje y podamos evidenciar nuestra ganancia manifestándose en nuestras vidas por un gran y total abarcante ejercicio de la fe simple en las maravillosas y seguras promesas de Dios para nosotros resultando en una acción progresiva hacia adelante con la Verdad Presente). --{11CS6 3.2}
Meditación para la Oración
“Elías había pensado que él era el único que adoraba al verdadero Dios en Israel; pero el que lee en todos los corazones reveló al profeta que eran muchos los que a través de los largos años de apostasía le habrían permanecido fieles. Dijo Dios: ‘Yo haré que --{11CS6 3.3}
queden en Israel siete mil; todas las rodillas que no se encorvaron a Baal, y bocas todas que no lo besaron’". --{11CS6 4.1}
“Si, en circunstancias penosas, hombres de poder espiritual, apremiados más de lo que pueden soportar, se desalientan y abaten; si a veces no ven nada deseable en la vida, esto no es cosa extraña o nueva. Recuerden los tales que uno de los profetas más poderosos huyó por su vida ante la ira de una mujer enfurecida. Fugitivo, cansado y agobiado por el viaje, con el ánimo abatido por la cruel desilusión, solicitó que se le dejase morir. Pero fue cuando su esperanza había desaparecido y la obra de su vida se veía amenazada por la derrota, cuando aprendió una de las lecciones más preciosas de su vida. En la hora de su mayor flaqueza conoció la necesidad y la posibilidad de confiar en Dios en las circunstancias más severas". --{11CS6 4.2}
“Los que, mientras dedican las energías de su vida a una labor abnegada, se sienten tentados a ceder al abatimiento y la desconfianza, pueden cobrar valor de lo que experimentó Elías. El cuidado vigilante de Dios, su amor y su poder se manifiestan en forma especial para favorecer a sus siervos cuyo celo no es comprendido ni apreciado, cuyos consejos y reprensiones se desprecian y cuyos esfuerzos por las reformas se retribuyen con odio y oposición". --{11CS6 4.3}
“Es en el momento de mayor debilidad cuando Satanás asalta al alma con sus más fieras tentaciones. Así fue como esperó prevalecer contra el Hijo de Dios; porque por este método había obtenido muchas victorias sobre los hombres. Cuando la fuerza de voluntad flaqueaba y faltaba la fe, entonces los que se habían destacado durante mucho tiempo y con valor por el bien, cedían a la tentación. Moisés, cansado por cuarenta años de peregrinación e incredulidad, perdió por un momento su confianza en el Poder Infinito. Fracasó precisamente en los linderos de la tierra prometida. Así también fue con Elías. El que había mantenido su confianza en el Señor a través de los años de sequía y hambre; el que había estado intrépidamente frente a Acab; el que durante el día de prueba había estado en el Carmelo delante de toda la nación como único testigo del Dios verdadero, en un momento de cansancio permitió que el temor de la muerte venciese su fe en Dios". --{11CS6 5.1}
“Y así sucede hoy. Cuando estamos rodeados de dudas y las circunstancias nos dejan perplejos, o nos afligen la pobreza y la angustia, Satanás procura hacer vacilar nuestra confianza en el Señor. Entonces, es cuando despliega delante de nosotros nuestros errores y nos tienta a desconfiar de Dios, a poner en duda su amor. Así espera desalentar al alma, y quebranta nuestra esperanza en Dios". --{11CS6 5.2}
“Los que, destacándose en el frente del conflicto, se ven impelidos por el Espíritu de Dios a hacer una obra especial, experimentarán con frecuencia una reacción --{11CS6 5.3}
cuando cese la presión. El abatimiento puede hacer vacilar la fe más heroica y debilitar la voluntad más firme. Pero Dios comprende, y sigue manifestando compasión y amor. Lee los motivos y los propósitos del corazón. Aguardar con paciencia, confiar cuando todo parece sombrío, es la lección que necesitan aprender los dirigentes de la obra de Dios. El cielo no los desamparará en el día de su adversidad. No hay nada que parezca más importante que el alma que siente su insignificancia y confía plenamente en Dios, y en realidad no hay nada que sea más invencible". --{11CS6 6.1}
“No sólo es para los hombres que ocupan puestos de gran responsabilidad la lección de lo que experimentó Elías al aprender de nuevo a confiar en Dios en la hora de prueba. El que fue la fortaleza de Elías es poderoso para sostener a cada hijo suyo que lucha, por débil que sea. Espera de cada uno que manifieste lealtad, y a cada uno concede poder según su necesidad. En su propia fuerza el hombre es absolutamente débil; pero en el poder de Dios puede ser fuerte para vencer el mal y ayudar a otros a vencerlo. Satanás no puede nunca aventajar a aquel que hace de Dios su defensa". Con seguridad dira en el Señor tengo mi justicia y mi fortaleza. --{11CS6 6.2}
“Hermano Cristiano, Satanás conoce tu debilidad; por lo tanto aférrate a Jesús. Permaneciendo en el amor de Dios, puedes soportar toda prueba. Sólo la justicia de Cristo puede darte poder para resistir a la --{11CS6 6.3}
marea del mal que arrasa al mundo. Introduce fe en tu experiencia. La fe alivia toda carga y todo cansancio. Si confías de continuo en Dios, podrás comprender las providencias que te resultan ahora misteriosas. Recorre por la fe la senda que él te traza. Tendrás pruebas; pero sigue avanzando. Esto fortalecerá tu fe, y te preparará para servir. Los anales de la historia sagrada fueron escritos, no simplemente para que los leamos y nos maravillemos, sino para que obre en nosotros la misma fe que obró en los antiguos siervos de Dios. El Señor obrará ahora de una manera que no será menos notable doquiera haya corazones llenos de fe para ser instrumentos de su poder". --{11CS6 7.1}
“En la visión del profeta Ezequiel aparecía como una mano debajo de las alas de los querubines. Esto tenía por fin enseñar a los siervos de Dios que el poder divino es lo que da éxito. Aquellos a quienes Dios emplea como sus mensajeros no deben considerar que la obra de él depende de ellos. Los seres finitos no son los que han de llevar esta carga de responsabilidad. El que no duerme, el que está obrando de continuo para realizar sus designios, llevará adelante su obra. El estorbará los propósitos de los hombres impíos, confundirá los consejos de aquellos que maquinan el mal contra su pueblo. El que es el Rey, el Señor de los ejércitos, está sentado entre los querubines; y en medio de la lucha y el tumulto de las naciones, sigue guardando a sus hijos. Cuando las fortalezas de sus reyes sean derribadas, --{11CS6 7.2}
cuando las saetas de la ira atraviesen los corazones de sus enemigos, su pueblo estará seguro en Sus manos". - Profetas y Reyes, capítulo 13 p. 130, 131, sólo extractos. --{11CS6 8.1}
El tema de hoy se ha sacado de:
He. 4:1-11 – “Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado. Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron. Pero los que hemos creído entramos en el reposo, de la manera que dijo: Por tanto, juré en mi ira, No entrarán en mi reposo; aunque las obras suyas estaban acabadas desde la fundación del mundo. Porque en cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día. Y otra vez aquí: No entrarán en mi reposo. Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de desobediencia, otra vez determina un día: Hoy, diciendo después de tanto tiempo, por medio de David, --{11CS6 8.2}
como se dijo: Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestros corazones. Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no hablaría después de otro día. --{11CS6 8.3}
Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas. Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia". --{11CS6 9.1}
En Hebreos 4:9 Pablo nos dice que queda un reposo para el pueblo de Dios. --{11CS6 9.2}
He. 4:2 – “Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron". --{11CS6 9.3}
Los “ellos” en este versículo se refiere al Israel de antaño y “nosotros” se refiere a aquellos de la iglesia Cristiana, o al pueblo de Dios en la dispensación Cristiana. --{11CS6 9.4}
Un reposo fue prometido al Israel de antaño, pero por su incredulidad no pudieron recibirlo. Este descanso no podía ser el Sábado, pues ellos no solamente recibieron la institución del Sábado, sino que también se les prometió el descanso del cual Pablo habla. Ni puede ser el descanso solamente paz con Dios. Es algo más. --{11CS6 9.5}
“Josué” (He. 4:8, margen) llevó al antiguo Israel a la tierra prometida, pero ellos no recibieron el descanso. Tampoco el pueblo de Dios en tiempos de Pablo lo recibió. Ni lo han recibido hoy. --{11CS6 9.6}
“Por lo tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios". (He. 4:9). --{11CS6 10.1}
Si nosotros somos el pueblo con el último mensaje, entonces debemos ser aquellos que estaremos entre los primeros en entrar en ese descanso. Ya que el descanso viene cuando uno ha terminado su obra, es entonces cuando hayamos terminado nuestra obra que podremos descansar. ¿Cuál es nuestra obra? ¿La obra que debemos hacer antes de que tengamos el descanso? --{11CS6 10.2}
En el versículo 4 de este capítulo, Pablo se refiere al tiempo de la creación. Por eso pondremos nuestra atención ahora brevemente en Génesis 1 de un registro de la creación como ustedes bien conocen. Allí se nos dice que la tierra y todo lo que hay en ella fue creado en seis días y que Dios descansó en el séptimo. Dios descansó en el séptimo día y Adán tomó parte en la celebración o conmemoración de la terminación de la obra de Dios. Adán no podía descansar pues no había trabajado. El sólo podía guardar solamente el día santo como conmemoración de la terminación de la obra de Dios. --{11CS6 10.3}
Gn. 1:27, 28 – “Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra". --{11CS6 10.4}
Esta fue la obra que Dios le dio al hombre que hiciera. Él creó la tierra para que se habitara. Era la obligación de Adán y Eva la de llenar la tierra con santos y de establecer leyes sobre toda la tierra. Obviamente esta obra no ha sido todavía terminada, porque no todo en la tierra está todavía bajo el sometimiento del hombre como lo intentó Dios. La tierra fue originalmente creada y provista con gente justa, pero por haber pecado Adán, todos sus hijos nacieron bajo pecado. Si nuestros primeros padres hubieran sido fieles, habría habido solamente habitantes justos. Ya que todos los nacidos de Adán son pecadores, existe la necesidad por lo tanto de que todos nazcan de nuevo. Entonces, por haber entrado el pecado, toda la obra del hombre se ha multiplicado; porque la labor adicional para traer la salvación predicando de la Palabra, se hizo necesaria. --{11CS6 11.1}
Gn. 3:16, 17 – “A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces; con dolor darás a luz los hijos; y tu deseo será para tu marido, y él se enseñoreará de ti. Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida". --{11CS6 11.2}
Dios aquí multiplicó grandemente la aflicción y la concepción. El género de la mujer, debido al pecado, había de dar a luz a muchos más niños que de otro modo --{11CS6 11.3}
ella los habría tenido si el pecado no hubiera entrado. Entonces, vemos que el número completo de los que Dios quería que habitaran la tierra habría ocurrido más rápidamente si Adán y Eva no hubieran pecado. --{11CS6 12.1}
Dios descansó el séptimo día porque había terminado Su obra creadora, pero la obra del hombre no había concluido todavía. La obra del hombre en realidad empezó cuando la sola obra creativa de Dios terminó. Por lo tanto, el hombre acompaña al Señor al descansar el Sábado en conmemoración de la terminación de la obra del Señor, pero el descanso que ha de ser el del hombre le será dado cuando su parte de la obra esté terminada. Cuando la obra de evangelización haya llenado la tierra con gente nacida de nuevo, entonces la gracia cesará y nuestra obra finalizará. Entonces entraremos en nuestro descanso, el descanso del que Pablo hablaba. --{11CS6 12.2}
La tierra hoy (incluyendo a los muertos) está quizá habitada con el número que Dios había intentado que heredarían la tierra. Pero cuando todos aquellos que no serán salvados son eliminados, el número completo no estará todavía formado, ni la obra del evangelio estará terminada. Indiferentemente de que tan grande pueda ser la población mundial, si la gente no se salva, la tierra todavía está vacía a la vista de Dios. --{11CS6 12.3}
Adán tenía que hacer su obra llenando la tierra con santos (lo cual en realidad es una extensión de la misma creación) con la ayuda de la Trinidad. Fue la Palabra la que forjó --{11CS6 12.4}
la creación en el principio y es la Palabra la que ha de terminar la obra de la tierra. La Palabra es ni más ni menos que la Trinidad hablándonos. La comisión de Dios para el hombre lo une con la Trinidad y muestra que Dios quiere que nosotros seamos sus colaboradores. El hombre con su boca y la Biblia con la Palabra. Aquí podemos ver que Dios le dio al hombre una gran parte en la obra de la creación y Él nos ha dado Su Espíritu para ayudarnos a hacerla. --{11CS6 13.1}
“Después de estas cosas, designó el Señor también a otros setenta, a quienes envió de dos en dos delante de él a toda ciudad y lugar adonde él había de ir". (Lc. 10:1). --{11CS6 13.2}
Los discípulos fueron enviados a todo lugar donde Cristo Mismo hubiera ido, mostrando que ellos tenían a Cristo a su lado mientras ellos hacían su obra. --{11CS6 13.3}
“Y mientras iban a dar las nuevas a los discípulos, he aquí, Jesús les salió al encuentro, diciendo: ¡Salve! Y ellas, acercándose, abrazaron sus pies, y le adoraron. Entonces Jesús les dijo: No temáis; id, dad las nuevas a mis hermanos, para que vayan a Galilea, y allí me verán". (Mt. 28:9, 10). --{11CS6 13.4}
Todo lo que Dios requería de sus obreros era que hablaran la Palabra.
“Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin". (Mt. --{11CS6 13.5}
24:14). “Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo". (Mt. 28:19, 20). --{11CS6 14.1}
Esta comisión se extiende hasta nosotros en el tiempo del fin; de la misma manera también lo hace la promesa de que El siempre estará con nosotros para ayudarnos en nuestra obra. --{11CS6 14.2}
Sí, todo lo que Dios requiere de nosotros es que hablemos la Palabra y El se ha comprometido a estar con nosotros para ayudarnos. --{11CS6 14.3}
El hombre ha sido ordenado a llenar la tierra, para traer niños. Él había de enseñar a sus hijos y convertirlos tan pronto como tuvieran el suficiente conocimiento; y él había de eliminar la maldad. Los hombres impíos no perecen para siempre en la tierra hasta después que el evangelio haya sido predicado. Hay una lección en esto que no deberíamos dejar de ver; esto es, mientras más despacio usted trabaja en el servicio de Dios, mayor será la aflicción. Si la iglesia hubiera sido fiel, más labor y recursos pudieron haberse ahorrado. Por eso, muchos otros van a tener que ser llevados al mundo para tomar el lugar de los perdidos. --{11CS6 14.4}
La gráfica de Las Trompetas prueba que el hombre debe llenar el mundo sólo con gente justa, pues fue la predicación de Noé que trajo el diluvio el cuál salvó a los justos y destruyó a los antediluvianos impíos. Fue la iglesia saliendo de Egipto lo que hundió a las huestes de los egipcios --{11CS6 14.5}
en el Mar Rojo. Y se les da a aquellos que han de proclamar el evangelio ahora, que reúnan a los santos y eliminen a todos los impíos. --{11CS6 15.1}
“No es como ellos la porción de Jacob; porque él es el Formador de todo, e Israel es el cetro de su herencia; el Señor de los ejércitos es su nombre. Martillo me sois, y armas de guerra; y por medio de ti quebrantaré naciones, y por medio de ti destruiré reinos. Por tu medio quebrantaré caballos y a sus jinetes, y por medio de ti quebrantaré carros y a los que en ellos suben. Asimismo por tu medio quebrantaré hombres y mujeres, y por medio de ti quebrantaré viejos y jóvenes, y por tu medio quebrantaré jóvenes y vírgenes". (Jer. 51:19-23). --{11CS6 15.2}
Dios logrará todo esto por medio de Su iglesia. Aquí vemos que todos los impíos van a ser partidos en pedazos, y es la obra de la iglesia de que esto sea logrado. Todo el propósito de Dios es doble; traer y echar a un lado; es decir, salvar a los justos y poner a un lado a los impíos. --{11CS6 15.3}
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz --{11CS6 15.4}
de las aguas. Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas. Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche. Y fue la tarde y la mañana un día". (Gn. 1:1-5). --{11CS6 16.1}
Había luz antes del cuarto día cuando el sol y la luna fueron creados. La luz fue la primera en ser creada. En este punto es interesante notar como los días de la creación y las siete trompetas, de alguna manera coinciden: (1) Primer día - el Espíritu se movía sobre la faz de las aguas y la luz fue creada; Primera trompeta - granizo (agua) y fuego cayeron sobre la tierra representando la Verdad predicada por Noé para darle luz a la gente que puedan escapar de la destrucción del diluvio. (2) Segundo día - las aguas divididas por el firmamento; Segunda trompeta - afectó el “mar”. (3) Tercer día - el mar y la tierra se dividieron y se creó la vegetación; Tercera trompeta - la estrella cayó en las aguas. (4) Cuarto día - el sol, la luna y las estrella fueron creadas; Cuarta trompeta - el sol, la luna y las estrellas golpeadas. --{11CS6 16.2}
(5) Quinto día - creación de las aves; Quinta trompeta– interesados porque las langostas tienen alas. (6) Sexto día --{11CS6 16.3}
- las bestias y los hombres fueron creados; Sexta trompeta
- interesados por caballos y hombres, y es en la sexta trompeta cuando el Reino de Dios se restaura y el hombre ocupa el lugar que había de llenar. (7) Séptimo día - descansó; Séptima trompeta - Misterio de Dios terminó.
creación y el hombre terminará su parte de la obra en la sexta trompeta. Así como Dios descansó de su obra en el séptimo día, así el hombre, en la séptima trompeta, en el cierre de gracia cuando la obra del evangelio sea terminada, recibirán el descanso al que Pablo se refería. Con esto vemos, que le tomó a Dios seis días hacer su obra y le está tomando al hombre 6.000 años hacer la suya. Después viene el milenio. Todo el pueblo de Dios guarda el Sábado como séptimo día en conmemoración de la obra completa de Dios antes de que ellos reciban el descanso que ellos mismos se ganaron. Para entrar en su descanso, no obstante, se requiere fe y creer, lo cual nuestros ancestros no poseyeron. --{11CS6 17.1}
He. 4:1–“Temamos, pues, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en su reposo, alguno de vosotros parezca no haberlo alcanzado". --{11CS6 17.2}
Para el pueblo de Dios de hoy no se trata solamente de la promesa del descanso, sino que para ellos se trata de tener realmente la experiencia. --{11CS6 17.3}
He. 4:2–“Porque también a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron". --{11CS6 17.4}
En este tiempo, un tiempo en el cual los profetas anhelarían vivir, el evangelio del Reino tiene que ser predicado inclusive más completo que como fue a los --{11CS6 17.5}
primeros Cristianos. Pero siempre requerirá fe y creer de parte de todos los que entrarán en dicho descanso. Aquellos que ahora no poseen más fe que nuestros ancestros que no pudieron entrar por su incredulidad, no se beneficiarán tampoco. --{11CS6 18.1}
He. 4:6, 7–“Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en él, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de desobediencia, otra vez determina un día: Hoy, diciendo después de tanto tiempo, por medio de David, como se dijo: Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones". --{11CS6 18.2}
El tiempo está limitado a un cierto día “en David” - el tiempo cuando Israel y Judá se están reuniendo - “Hoy, diciendo después de tanto tiempo, por medio de David, como se dijo: Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones". --{11CS6 18.3}
He. 4:8, 9 – “Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no hablaría después de otro día. Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios". --{11CS6 18.4}
Después del cierre de la gracia, Dios va a hacer un monumento conmemorativo eterno afirmando que nosotros hemos terminado nuestra obra. El Sábado apunta hacia el descanso en el cual podríamos entrar para siempre, cuando hayamos terminado nuestra obra como Dios terminó la Suya. --{11CS6 18.5}
He. 4:9-11 – “Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. Porque el que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas. Procuremos, pues, entrar en aquel reposo, para que ninguno caiga en semejante ejemplo de desobediencia". --{11CS6 19.1}
¿Estás creciendo diariamente en la fe? ¿Ves que los justos vivirán sólo por fe? Si estás seguro de que tienes suficiente fe, ¿la estás mezclando también con las obras correspondientes? ¿Estás haciendo todo lo que puedes para ayudar a llenar la tierra con los santos? Hermanos, estas preguntas son solemnes, especialmente cuando uno contempla el pensamiento que la única forma como podemos realmente regocijarnos en la creación de Dios es tomando parte en ella. Fue por esta misma razón nacida del amor eterno de Dios por el hombre, que hizo que Él le concediera al hombre una gran parte al establecer el mundo después de Su orden justo y el Señor nos ha dado en este día un programa de acción precisa y confiable en Su mensaje de la hora undécima, de modo que ninguno de nosotros necesite errar en conocer el gran privilegio que tenemos de ser verdaderos testigos para El en palabra, hecho y acción. No dejemos de hacer por eso la obra y prolongar así el lamento y el sufrimiento del mundo, pero dejemos que cada uno de nosotros esté entre aquellos que cumplirán el propósito por el cual fuimos creados, para verdaderamente ayudar a traer el completo y verdadero “reposo” y el eterno gozo. Dios tiene a fieles que harán esto. ¿Será usted uno de ellos? --{11CS6 19.2}